La mujer que viste Rosas Rosas es coqueta, femenina y elegante, le gusta presumir y se decanta por los tonos que le favorecen, no se esconde tras la gama de marrones, negros, azules oscuros y grises para disimular caderas o restarse kilos. Simplemente les toca ponerse guapas y escogen lo que les apetece de su armario. Para ellas diseñan Rosas Rosas, para mujeres con curvas que se sienten libres, sin complejos y seguras de cómo son, simplemente porque se quieren.
Las medidas y patrones de la firma se orientan, por tanto, hacia cuerpos con eses marcadas, bautizados en moda como curvys. Sector, por cierto, numeroso pero olvidado por la moda porque, según editores como Alexandra Shulman, ex directora de Vogue en su edición británica, una portada con chica curvy no vende revistas.
Pero piensa, ¿nunca has estado un poco pasada de peso en tu vida o has conocido alguien que lo haya estado o esté? Haz memoria en cuanto a tí… ¿Navidad, veranito, vacaciones de primavera con torrijitas, pestiños y demás? ¿No? Si has sido mamá, ¿recuerdas el momento post parto? ¿No has pasado por esa etapa en la que el día de volverte a ver los pies no llega y si llega, llega tarde? Bueno, si no has respondido sí a ninguna pregunta eres de las minorías tocada por la varita mágica de Cenicienta. El resto de las mortales me da que no.
De todas formas, insisto. Seguro que en algún momento no has podido abrocharte bien el pantalón, o no te has puesto esto o aquello porque no te va de cintura y te sientes incómoda. ¿Te imaginas que no encontraras nada de tu talla, bonito, elegante y cómodo para vestir? Pues eso es lo que tratan de evitar y combatir en Rosas Rosas. Y lo hacen muy bien porque me consta, por vuestros comentarios en redes, que os gusta, al margen del tallaje que uséis. Eso lo que trata de hacer Rosas Rosas, vestirte sin más, en tu color favorito y con la silueta que prefieras, para ayudarte a verte guapa y cómoda.
¿Y cómo lo hace esta temporada? Pues con una inyección bien cargada de autoestima. Eso que algunas veces te falta delante del espejo.
Para ello se han inspirado en una partecorazones. Así, tal cual te digo. Al menos es lo que reza en la letra de la copla ‘La Zarzamora’, ¿te suena verdad? Esta letrilla de desamor la han cantado muchas artistas, entre ellas Rocío Jurado, Lolita y, por supuesto, su madre, Lola Flores. Mito del flamenco que este año está dejando huella inspiradora en diversas colecciones de moda, volviendo así a estar con nosotros un poquito más viva que de costumbre, porque los iconos no mueren, solo dormitan y, de tanto en tanto, se pueden palpar y sentir, aunque sea de otra manera. Es lo que tiene ser divinidad.
En Rosas Rosas han recreado sus particulares zarzamoras una a una. Aunque quizás no tengan los ojos como las moras, ni sean de hielo como decían, pero son presumidas y enamoran, engatusando a los flamencos del colmado, que ya ni se desvelan ni vigilan a deshoras, para saber del desgraciado, con anillo de casado, que cameló a la Zarzamora.
Esta viene a ser la reinterpretación del texto que realizan para dar forma a sus propuestas de temporada. Sintetiza la personalidad de La Zarzamora, la que se adivina entre líneas, cautivadora y distante, pero sensible, elegante y glamourosa, que parece tenerlo todo pero le falta ese amor no correspondido. Al fin y al cabo ella es de carne y hueso y no puede evitar llorar desconsolada por una relación rota porque nunca podrá ser.
Toda esa fortaleza y estilo que derrocha, Rosas Rosas ha sabido captarlo y unirlo con puntadas para crear su nueva colección verano 2018 para mujeres con curvas. En la que se repiten ciertos tonos, adorados por la firma y que seguro que sabes cuáles son. De la gama de los claritos el nude y el beige. Apostando, por tanto, otra vez, por estas propuestas osadas y coquetas para chicas con siluetas seseantes. Mira este diseño en tono maquillaje en el que han mezclado texturas, reservando para las mangas el plumeti, que se rematan con volantitos al hombro en el mismo tejido.
En este otro, entre mis favoritos de la colección, me encanta la estratégica colocación de volante vertical que reduce la barriga a la vista y resalta la silueta.
Y he aquí un, supuestamente, prohibido para tallas grandes. Este vestido ajustable y básico de cuello cerrado, manga francesa y largo por debajo de las rodillas. ¿Quién no querría uno así para estas Fiestas de Primavera? ¡¡Yo sí!!
También hacen su particular rescate de elementos ochenteros, adaptándolos para esta segunda década del XXI. Se trata de la chaqueta o blazer, que en aquellos años nos colocábamos cerrada acompañada de falda o pantalón pitillo, pues hacía las veces de camiseta o camisa. Estilismo propio de viernes o sábado tarde, por entonces, y que Rosas Rosas te lo convierte en un perfecto look de invitada de boda. Diseñado en un tejido rico con flores al hombro en el tono de temporada, el ultravioleta, a medio camino entre el índigo y el morado clarito, engrosa mi lista de favoritos de la temporada de moda.
A este tono tendencia, han añadido otros colores como el azul en tono pastel para vestido de falda lápiz abotonada y escote delantero vertical. Pero con ese toque que favorece a las chicas plus size. Os cuento. Normalmente, esta abertura delantera comienza en el cuello y se alarga hasta la cintura. Rosas Rosas le reduce la longitud, redirigiéndolo a escote cruzado para afinar cintura y resaltar el busto. ¡¡Todo un acierto el resultado!!
Y … ¿Qué os parece un vestido de lunares en coral con volantitos en las muñecas para ir flamenca a la Feria sin tener que enfundarte el traje de flamenca? Nada más que te falta el mantón de flecos y enrejado consistente y un bolsito de mano. ¡¡Simplemente perfecto!! ¿No crees?
Otro de los colores que nos ha traído Rosas Rosas esta temporada 2018 ha sido el coral y, como ha ocurrido con el azul, en varios tonos. Éste es un dos piezas, con falda tubo volanteada en la cintura lo cual, no sufras, no aumenta volumen, todo lo contrario, disimula la barriguita y te resta kilos para quien mira.
Precisamente este anaranjado dulce ha sido su favorito para la noche, pero se les ha colado alguno que otro en otros colores. Ya sabes la preferencia de la firma por los colores vivos, pero en una tonalidad favorecedora. Además, para estos diseños de largo hasta los tobillos no se limitan y no escogen, precisamente, el camino fácil para vestirte. Pues lo sencillo para curvys son siluetas princesa, esas de vuelo fruncido desde cintura. Sin embargo, se decantan por sirenas, recurriendo a la simplicidad que conlleva el minimalismo en prendas que no marcan el talle, sino que lo insinúan, para recrearse en espaldas descubiertas. En este caso en un tono buganvilla.
Entre los corales asalmonados, imaginan un drapeado desde la cintura, muy a lo Venus de Milo, por esa colocación de los plisados en torno a un vértice caído hacía las caderas.
Con esta nueva colección presentada en Code41 Trending en su última edición, vuelve a demostrar que, visto lo visto en moda y a pesar del ruido que hace el movimiento body positive, debemos sentirnos afortunadas por tener cerca una firma de moda que viste a la mujer tal cual es, sin necesitar cambios en su cuerpo. Que es consciente que existen otras tallas y otros cuerpos que tienen las mismas necesidades de indumentaria que el resto. Y que buscan la comodidad de la mujer en su propio cuerpo. Rosas Rosas se suma así a esa minúscula lista de firmas que optan por diseñar para mujeres con curvas.
En cambio, Rosas Rosas te lo pone fácil. Simplemente necesitas albergar el deseo de verte bonita y no prohibirte las tendencias, abrirte a ese mundo de posibilidades que te ofrece esta firma. Eso sí, eligiendo las que realmente te sienten bien y te favorezcan. Sólo así conseguirás multiplicar tu seguridad en tí misma y dejarás de minusvalorarte. ¡¡El espejo ya no será tu enemigo!! ¡¡Ya lo verás!!
Por eso sólo me queda daros las gracias, Rosas Rosas, por apoyar y ayudar con vuestra colección a la moda curvy en todos los sentidos. Porque otras modas existen y son compatibles con lo que nos han acostumbrado a ver en pasarela. Ya lo ha dicho Michael Kors en alguna ocasión: ‘Hoy la moda no tiene fronteras’. Tan sólo se ha de aceptar, sin recurrir al desmerecimiento, rechazo u ofensa, pues hay otras formas de hacer moda que también embellecen a la mujer.